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OPINION

EDITORIAL: Nadie dijo que sería fácil

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NOTA DEL EDITOR: La columna First-Person (De primera mano) es parte de la edición de hoy de BP en español. Para ver historias adicionales, vaya a

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NASHVILLE (BP) -- En este tiempo de primavera las tormentas son frecuentes en Tennessee. Podemos amanecer con un cielo despejado con sol, y de pronto todo comienza a oscurecerse y ponerse como si fuera de noche. La visibilidad se reduce al mínimo y las autopistas se llenan de accidentes.

La vida de los cristianos en ocasiones también se nubla y puede llegar a parecer muy oscura. Una vez un amigo me dijo: "Estoy en medio del túnel, y cuando veo una luz al final del mismo, es otro tren que viene en sentido contrario." Pero Jesús sabía eso. Él trató de alertar a sus discípulos diciéndoles: "...en el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo" (Juan 16:33).

Hace poco un querido amigo enfrentó una tragedia inesperada. Por muchos años él ha estado ministrando a muchas personas en tiempos de dificultades, en muchas partes del mundo. Pero ahora era diferente. La oscuridad tocaba a su puerta y entraba sin pedir permiso para trastocarlo todo en su vida, menos su fe y su confianza en el Señor. Todos sus amigos nos sentimos sobrecogidos y hasta turbados. ¿Por qué le sucedía esto precisamente a él?

Es cierto que algunas veces no podemos entender los motivos, pero podemos estar seguros que Dios, a pesar de todo, tiene un propósito en lo que estamos pasando. Es como la lima comiendo al metal para darle la forma adecuada. Puede ser doloroso, pero con seguridad es necesario, aunque no entendamos el por qué.

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Pedro vio al Señor en medio de la tormenta y oyendo su voy, sin pensarlo, se lanzó al agua, sin considerar la ley de gravedad, y mientras tuvo su vista fija en el Señor anduvo sobre las aguas.

Vivimos en un mundo caído en el que el dolor y los problemas son la norma diaria. Enfermedades, muerte, pecado, traición, engaño y la lista sigue llenado páginas enteras. Pero hay buenas noticias. A pesar de lo que parezcan las circunstancias, Jesús ha vencido al mundo. En medio de la oscuridad más intensa, Jesús brilla y su luz es capaz de iluminar el camino para que nuestro pie no tropiece. Él es fiel y nos sostiene aún cuando las cosas parezca que no tienen sentido.

No es fácil, es verdad, pero nadie alguna vez dijo que lo fuera. Nuestra lucha es contra principados y potestades; contra los gobernadores de las tinieblas, pero siempre podemos confiar porque nuestro Jesús venció al mundo y su victoria asegura la nuestra.

Óscar J. Fernández es el Senior Editorial Project Leader para el Multi-Language Team de CRD Publishing. en Church Resources Division de LifeWay Christian Resources en Nashville, Tenn. Es además escritor independiente y un estudioso de la Biblia.

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